Embarazada fui sorprendida por mi marido con dos amigos, termine teniendo un trío salvaje y lleno de lujuria.
No tienen prisa, la lentitud es la clave en el ritual del amor,En el templo el placer se da en cada rose con suma delicadeza y erótismo.
El deseo y la lujuria pueden despertar en cualquier momento, incluso en situaciones inesperadas. La tentación puede ser fuerte, pero la decisión siempre está en tus manos.
Descubrí en ella no solo unas enormes y deliciosas tetas, sino también una pasión desenfrenada que me llevó a disfrutar cada momento juntos.
Yamila y yo nos habíamos conocido por casualidad unos seis años atrás, en un sanatorio de la ciudad, nada importante, visitas médicas de rutina, había mucha gente
Diego despertó en mí una lujuria sexual dormida, y ahora me masturbo con un vibrador pensando en él, recordando sus caricias y entregas apasionadas.
La Navidad nos unió de una forma inesperada, exploramos nuestras pasiones como amantes enamorados, olvidándonos de todo a nuestro alrededor. Una noche única.
El morbo de lo prohibido me excitaba y me llevó a cumplir mi fantasía de ser masturbado por otro hombre, saciando mis deseos más oscuros.
En el gran éxtasis de la pasión, descubrí el placer en la libertad de explorar nuevos caminos y compartir mi intimidad con dos hombres.