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Visitante en el trabajo (primera parte)

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Hola quiero compartirles como el día de hoy en mi oficina tuve un visitante inesperado estaba saliendo un poco tarde por decidir terminar un trabajo que me estaba solicitando con urgencia mi jefe así que quede sola en la oficina esperando tener un poco de concentración me encerré sola en mi oficina ya que el clima estaba un poco frio de repente comencé a escuchar algunos ruidos pero yo coloque algo de música y no le preste atención, luego recordé que había pedido un domicilio de algo de comida y Salí rápido a contestar el teléfono para que lo dejaran subir, me volví a sentar en mi escritorio con mi blusa y falda del uniforme que se me subía un poco al momento de sentarme como siempre ya saben que me gusta usar faldas cortas.
Cuando golpearon mi puerta me di cuenta que el hombre que entraba era un chico joven un repartidor bastante atractivo y no pude evitar mirarlo fijamente cuando de repente sentí que su mirada también se había quedado fijamente en mi escote recordé en donde estaba era el lugar de mi trabajo y no podía colocarme con juegos saque mi billetera con rapidez y comencé a sacar el dinero le di algo de propina mientras me daba cuenta que el muchacho estaba algo sonrojado y no me decía ni media palabra yo solamente le dije muchas gracias y comencé a destapar mi comida, al darme cuenta que no se movía le pregunte si estaba bien y le dije la propina es tuya muchas gracias.

Paso un minuto cuando me pregunto si se podía sentar ya que se había mareado y estaba algo indispuesto yo le dije claramente que sí y le ofrecí un vaso de agua el cual el me recibió tembloroso quizás subiste muy rápido las escaleras le dije yo y él dijo quizás.

Estas sola me pregunto a lo que yo le dije bueno con los vigilantes del edificio con algo de nervios por la pregunta ya que no era normal que un repartidor se interesara por esos detalles, el muchacho se veía cambiando de colores de pálido a rozagante por lo que me ofrecí a traerle algo de alcohol para que oliera y estuviera más tranquilo y recupera la compostura. Cuando me acerque a colocarle el alcohol en su nariz me di cuenta que su mano me estaba sujetando la cintura pero creí que era por la debilidad y mareo que tenía.
No podía evitar sentir sus brazos fuertes y su cuerpo ejercitado me dijo tengo algo de calor te importa si me quito mi chaqueta por un momento yo le conteste que podía hacerlo alejándome de él y quitándole su mano de mi cintura que estaba bastante apretada por él. Se me había subido la temperatura del cuerpo con todo lo sucedido y no podía evitar sentir esa tensión sexual que había en la oficina, mientras el terminaba de mejorar yo decidí comenzar a comer antes de que se enfriara el pedido y poner algo de música duro para alivianar la tensión, cuando de repente comenzó a tratar de hacerme la conversación me pregunto si podía acompañarme mientras terminaba de trabajar este era su ultimo pedido y podía entregar el dinero mañana a su empresa- no es bueno que una mujer tan linda este sola y salga tan tarde en este sector si deseas te puedo llevar en mi moto a tu casa, si no es mucho atrevimiento termino- yo me quede mirándolo fijamente a los ojos la verdad no se veía muy peligroso más bien inofensivo y algo de compañía no me sentaría mal- depende como te sientas le conteste.-
Le compartí algo de mi comida para que se sintiera más cómodo ya que yo estaba satisfecha el agradecido comenzó a comer y se dio cuenta de que yo lo miraba sin querer de arriba abajo pero no era un secreto los dos nos atraíamos y mucho, -me gustas me dijo mirándome a los ojos y no suelo hacer esto nunca pero no puedo evitarlo ni irme sin decirte que me encantas, eres atractiva y te ves tan interesante que quiero besarte en este instante- me dijo mientras la que ahora la que estaba sin palabras era yo que podía decirle si yo también tenía ganas de besarlo quería tenerlo cerca de mí, pero tenía miedo en los corredores de la empresa habían cámaras y seguramente el vigilante no tardaría en darse cuenta que el domicilio aún seguía arriba conmigo y llamaría o subiría para saber si algo había pasado; así que decidí sin saber lo que iba a pasar después llamar yo a la recepción para avisar que el muchacho estaba algo enfermo y se iba a quedar arriba mientras se sentía mejor estaba autorizado por mí y no había problema el vigilante solo me dijo que si necesitaba ayuda le dijera a lo que yo le conteste que sí.
Mientras hacia la llamada el me miraba algo asombrado pero con una sonrisa en su rostro que dejaba ver el deseo que se apoderaba de los dos…
Continuara

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